CRÓNICA DE NAVIDAD 2017

 

Navidad de mil colores

En el ambiente que creas.

Para un niño que nació

Envuelto en mantita vieja.

Que su madre, le tejió.

De caliente, lana de oveja.

 

Navidad de cuatro velas

Encendidas en tu corazón.

Tiempo de espera y venida

Que nada tiene que ver,

con lo que ahora veo yo.

 

Natividad, es nacimiento

Pesebre, Belén, ofrecimiento

Y una estrella que brilló.

En tinieblas de este tiempo.

(Rosa Cortizo)

 

A mediados de diciembre publicamos la programación prevista para la Navidad 2017.  La hemos  cumplido y vivido intensamente, no han faltado niños para recordarnos que teníamos que olvidar preocupaciones. Es bonito compartir, ilusionar y transmitir el espíritu de la Navidad.

El día 23 Carlos Alonso como pregonero de la Navidad 2017, evocó sus sentimientos cristianos de una manera vehemente y valiente. Amenizamos con un concierto de Yesca hecho a medida, recordando canciones recogidas a Perpe, a La Sra. Sofía en anteriores trabajos de campo, y entonando piezas de la comarca.

PREGÓN DE NAVIDAD, 23-12-2017  –  Por Carlos Alonso Camarero

Buenas tardes Rvdo. Sr.Cura Párroco, Excmo. Sr. Alcalde y demás miembros del Excmo Ayutamiento, vecinos de Mecerreyes y feligreses de esta parroquia de San Martín obispo, descendientes de este pueblo, arrimados, amigos y visitantes.

Muchos os preguntaréis quién ese Señor de barba blanca y por qué está aquí y se atreve a hablarnos?.

Pues estoy aquí por varias razones:

1ª Estoy aquí porque soy Cristiano y celebro y me gusta la Navidad, e imagino que la mayoría de ustedes aquí presentes también.

2ª Estoy aquí porque hace 40 años, concretamente un 24 de marzo de 1977 conocí a una hija de Jesús y Beatriz y desde entonces no nos hemos separado y ya llevamos 37 años felizmente casados. Además fue en esta iglesia, en el lugar donde estoy yo ahora, donde nos juramos y prometimos fidelidad y amor eternos.

Y la 3ª razón es porque ese grupo de magníficas y desinteresadas personas, de buena gente, naturales de este pueblo o que tienen sus raíces aquí, aunque vivan fuera  y que ayudan a conservar los principios morales y las tradiciones cristianas de nuestra vieja tierra castellana, me lo han pedido.

Y Cómo podía yo, ahora que tengo todo el tiempo del mundo, pues me acabo de jubilar, negarme a ello, máxime cuando comparto con ellos principios y valores morales y humanos? Especialmente nuestras creencias religiosas.

Y prestad atención jovencitos y no tan jovencitos, Gracias a ellos, vosotros, muchos nietos y probablemente algún biznieto de los que habitaron y todavía habitan este pueblo, aprenderéis, o habréis aprendido, viendo las imágenes del Belén que hoy se enciende, cómo vivieron y lo que trabajaron y sufrieron nuestros antepasados, para que nosotros ahora podamos abrir un grifo y que salga agua, dar un botón y que encienda una luz o que llamemos por teléfono y venga una ambulancia a llevarnos a un hospital cuando estamos enfermos. Y muchas otras cosas más que vosotros ya sabéis.

Pues como la mayoría de los que estamos aquí somos y nos sentimos cristianos, estas fechas son muy importantes, porque, qué es lo que estamos celebrando a partir de hoy?

Pues estamos celebrando la Navidad; el gran milagro de que todo un Dios, el único, porque solo hay uno, el creador de todo, el todopoderoso, el inmensamente misericordioso y bondadoso y justo, adquiriera la condición humana, la condición  de sus criaturas preferidas y viniera a vernos; a decirnos cómo debíamos comportarnos, porque la humanidad estaba a oscuras y desviada de su camino.

Algo parecido está ocurriendo ahora, por eso hay que prestar atención al mensaje de la Navidad, porque ese mensaje sigue estando tan vigente como cuando Jesucristo nació.

         Hay dos fechas fundamentales para los que somos cristianos; la primera es esta (el nacimiento de Cristo), la otra, por supuesto es la resurrección de Cristo, sin la cual nada tendría sentido.

Y este acontecimiento, la Natividad de Jesús, hay que celebrarlo y hacerlo sin miedo a que nos vean. Hay que demostrarlo incluso en la calle.

Para aquellos que todavía tengan dudas, la doctrina cristiana es buena, contiene los principios morales con los que hemos sido educados y que hemos recibido de nuestros mayores y gracias a los cuales vivimos en democracia. Repasad los mandamientos de la Ley de Dios.. no robar, no matar, no difamar, no desear los bienes ajenos, honrar a los padres… y veréis cómo coinciden con las normas de con vivencia que hay en nuestra Constitución y en las Leyes:

No robar, no matar, amar y respetar a los padres….. no codiciar los bienes ajenos, no levantar falsos testimonios y sobre todo amar al prójimo como a uno mismo.

Lo mismo ocurre en toda Europa, porque sus naciones que pertenecen a la civilización Cristiana, que, por cierto, ahora está en peligro.

Nosotros los mayores, padres y abuelos, podemos tratar de evitar ese peligro y podemos enseñar a nuestros hijos a soñar, a vivir y a volar, pero tenemos que saber que sus sueños no serán los nuestros, no volarán con nosotros y no vivirán nuestra vida; pero en cada sueño, en cada vuelo y cada vida de ellos, quedará algo nuestro, ya que las palabras pueden convencer pero el ejemplo que los demos, los arrastrará.

Es cierto que los vientos que soplan actualmente, van en contra de muchos de esos principios cristianos, predican el ateísmo y critican duramente las conductas desviadas de algunos cristianos, o que se dicen cristianos, pero la Iglesia siempre ha sufrido ataques de sus enemigos.

Los más mayores recordarán tiempos pasados, ya un poco lejanos en los que por ser cristianos los perseguían. Esperemos que aquellos desgraciados y luctuosos hechos no se repitan.

Pero estos vientos, especialmente propagados por los medios de comunicación, que atacan de manera despiadada a la Iglesia católica y a su máximo representante, el Papa, No hacen mención, o procuran ocultar la gigantesca labor social que hace la Iglesia, sus miles de misioneros repartidos por el mundo, de este pueblo hay y ha habido varios y los millones de voluntarios de cáritas y otros que, en silencio, se ocupan de los más necesitados, de los desheredados de la tierra, de aquellos a los que nadie quiere arrimarse, leprosos, enfermos del sida, ancianos olvidados en residencias, personas sin hogar. Se ocupan de aquellos por los que Jesucristo tenía una gran predilección.

De todas maneras, si vemos alguna conducta de algún cristiano relevante, que no está de acuerdo con el Evangelio, lo que debemos hacer es seguir el consejo de Cristo: haced lo que ellos digan y no lo que ellos hagan.

Pero no olvides que Jesucristo dijo que las fuerzas del infierno no prevalecerán sobre la Iglesia, así que, como decía San Juan Pablo II a quien tuve la suerte de conocer en  persona en 1982, la primera vez que vino a España, “No tengáis miedo”.

No tengáis miedo a confesar que sois cristianos. Ya lo he dicho al principio, yo soy cristiano y estoy aquí por eso.

Ahora hay muchos ateos prácticos, que les gustaría que Dios no existiera, para hacer de su capa un sayo, pero ateos de verdad hay muy pocos.

Es muy cierto el dicho ese de que la gente es atea hasta que se empieza a caer el avión, entonces aparecen las expresiones: Hay Dios mío!!, Madre de Dios!!, Dios mío sálvanos…..

Ejemplos de estos los tenemos en nuestro país y si leéis la reciente historia de España, ha habido personajes muy influyentes, que se declaraban ateos militantes, pero al llegar la hora de ir a rendir cuentas a Aquél en el que decían que no creían y todo lo ve y lo sabe, han pedido auxilio espiritual.

La Navidad es también tiempo de alegría familiar y son fechas de acción de gracias.

Alegría familiar porque la tradición es juntarnos. Es la oportunidad para alegarnos y decir a nuestros familiares, especialmente a nuestros padres, hermanos, hijos y nietos, que los queremos.

Y hay que aprovechar estas oportunidades, porque ahora los tenemos, pero quizá, si lo dejamos para otra ocasión ya no podamos porque ellos o nosotros ya no estaremos.

Es también la hora de superar las pequeñas heridas que la convivencia produce y de quitar importancia a pequeñas cosas que no la tienen. Hay que olvidar y procurar dejar aparte las pequeñas rencillas. El odio hace más daño al que odia que al odiado.

Muchas veces vivimos como si no fuéramos a morir y nos morimos como si no hubiéramos vivido. Pensamos que tenemos dos vidas y, solo nos damos cuenta de que tenemos una, cuando estamos a punto de perderla.

Dedicamos mucho tiempo y esfuerzos a preparar  nuestro futuro y nos olvidamos de vivir el presente, pero el pasado no volverá, el futuro es in cierto y a lo mejor no llegamos a verlo, así que, lo único que podemos hacer, es vivir el presente. No debemos afanarnos en amontonar aquello que no nos vamos a llevar. Tan cierto como que ahora es de noche, que ni el más rico y poderoso en este mundo, podrá añadir un segundo a su vida, ni llevarse un gramo de oro cuando muera. En eso la propia naturaleza nos iguala.

         Y he dicho que tenemos que vivir el presente en buena armonía con los que tenemos cerca, porque de aquí solo nos vamos a llevar las buenas obras que hayamos hecho, las alegrías que hayamos vivido con nuestra familia y amigos y las sonrisas que hayamos enviado y dedicado a aquellos con los que nos hemos relacionado y especialmente a los más necesitados. El resto: dinero, propiedades, títulos, honores, incluso la belleza, se quedarán aquí. Con la muerte todos seremos igualados, ricos, pobres, sanos, enfermos…

La Navidad es también tiempo de acción de gracias:

Primero por la encarnación de Cristo como hombre, gracias a cuyas palabras y acciones hemos podido hacernos una mínima idea de lo que es ese Dios todo poderoso.

Segundo, por haber tenido unos padres tan buenos, que nos dieron la vida, nos alimentaron y nos educaron cristianamente.

Tercero por vivir en un país tan bueno- Uno se da cuenta de lo bien que vivimos en España cuando se viaja por el mundo, y a cuantos más países mejor, y compara.

Cuarto, porque todos los aquí presentes, no tenemos que preocuparnos de si mañana vamos a poder comer o no, si acaso, si comeremos cordero, pollo o besugo (bueno el besugo está muy caro).

Tampoco nos tenemos que preocupar por dónde vamos a dormir esta noche; todos tenemos un techo, mejor o peor, bajo el que cobijarnos. Gracias a Dios todos… tenemos una cama para dormir tranquilos, sin el peligro de que una bomba nos vaya a caer encima, porque aquí no hay guerra y tampoco nos van a perseguir, por el momento, por ser cristianos o decir que lo somos o por venir a nuestra preciosa iglesia.

Somos pues, más afortunados que el 80% de la población mundial. Tenemos salud, médicos y hospitales cerca, agua, comida, personas que nos quieren.

Y todos los que estamos aquí, podemos andar….. y, mejor o peor, vemos, oímos, sabemos leer y escribir, nos podemos comunicar….

No sé lo que pensareis vosotros, pero yo creo que todo eso son bendiciones de Dios, porque hay miles de millones de personas que no tienen la suerte de disfrutar de eso que acabo de mencionar. Pues por todo ello debemos dar gracias a Dios, abuelos, padres, hijos y nietos y quizás algún bisabuelo, que me escucháis.

Es también la hora de acordarnos de los que van a pasar estas fechas en los hospitales, aquejados algunos de graves enfermedades y en las residencias, olvidados incluso por sus familiares, de los que no tiene familia, ni hogar ni trabajo, que tendrán que dormir en la calle o que no tendrán nada que llevarse a la boca.

Y al acordándonos de ellos debemos de tratar de ser moderados en el consumo, no hartarnos de comer de todo y emborracharnos, llegando incluso a enfermar, o desperdiciar comida y, a la hora de comprar para estas fiestas, procurar pensar en los deseheredados de la tierra y guardar parte del dinero para Cáritas que, yo os aseguro, que esta organización Humanitaria de la Iglesia, aprovecha y reparte de manera justa cualquier donativo que hagamos. Esto será vivir como cristianos y celebrar la Navidad como nos dijo el niño Dios que se convirtió en Hombre.

 Seguro que lo habéis oído muchas veces en la iglesia o en las catequesis, lo que dijo Jesucristo que el diría cuando fuéramos a rendir cuentas al Altísimo: Venid a mí benditos de mi Padre, porque tuve….hambre, sed, desnudez, sufrí prisión, enfermedad y me alimentaste y diste de beber, me vestiste, me viniste a ver….

Después de lo dicho solo me queda desearos a todos Feliz Navidad, Alegría, Paz y Armonía en vuestra familias…..

Buenas Noches.

El público agradeció con sus aplausos estas dos intervenciones, para pasar a la bendición de la 31ª edición del Belén tradicional y deleitarse con tan minuciosos detalles. Estrenamos iluminación en este pueblo de Belén que ha puesto su escena principal junto a a las fuentes del siglo XIX, recreando, pozas, pilones, bebederos…, el agua que tanta falta nos hace ha centrado el diseño, y como en años anteriores un éxito de reconocimientos y visitantes.

Enlace: BELÉN «EL AGUA»

El 24, último domingo de adviento, fogones en marcha, varias familias eligieron el hogar guileto para reunirse. Ya por la tarde junto al árbol de Navidad iluminado de la plaza, iniciamos la operación kilo y cantamos villancicos.

A las 12 de la noche nueva cita en la iglesia, Misa del Gallo cantada por Jorge y Gabriela; aunque se notan ausencias por defunción, edad, o frío, todavía somos unos cuantos los que al finalizar, adoramos al niño Jesús y nos damos un beso sincero deseándonos una ¡Feliz Navidad!

La semana del 25 al 31 hemos tenido a los niños activos, “un sin parar” cine, palomitas, chocolate, manualidades, ensayos para el Festival de año Nuevo… entre 15 y 25 niños, han participado en las mismas, días que recordarán sin duda a lo largo de su vida.

 

Gracias a Elena, Claudia, Paula y Miguel, por ayudar a que fuera posible tanto divertimento.

El día 27 el temporal llamado Bruno, hizo de las suyas, tirando el árbol de Navidad de la plaza, por la  tarde ya estaba solucionado el desastre. El resto de la iluminación navideña, no sufrió con los fuertes vientos.

 

Año Nuevo en Mecerreyes es un día también de alegría, unos se han ido con la otra parte de la familia, pero otros vienen a pasar la semana al pueblo. Esto dificulta los ensayos del festival infantil, pero la voluntad y traerse aprendido el papel de casa lo puede todo.

Representamos la obra de teatro “Los molineros de Belén” obra que ya hicimos hace 17 años, destacar la ilusión puesta por aquellos molineros que 17 años después quisieron volver a protagonizar este pequeño guión junto al resto de personajes, niños y niñas 20 años menores, Elena Santamaría y Daniel Santamaría se volvieron niños otra vez.

Las intervenciones de Clara, Eva y María, en el relato de ”La familia de los López”,

La intervención musical del Clara con su flauta travesera, las poesías de los más pequeños (Ángela, Carla, Martín, Pablo, Daniel y Marcos) y la animación de villancicos con el público, nos entretuvo durante más de una hora en el salón del Ayuntamiento.

 

El mal tiempo condicionó los planes de esta primera semana de enero. Pero no cesamos en buscar la solución que permitiera representar el Belén viviente infantil la noche del día 5 de enero.

 

Adaptamos el guión y las escenas para hacerlo en el interior de la iglesia, emoción de niños y mayores a la entrada de sus majestades los Reyes Magos en la iglesia para adorar al niño Jesús, solemnidad que solo se vio interrumpida por el llanto de la pequeña Mencía, la bebé que junto a sus padres Mª Nieves Vicario y Javier, representaron a la familia de Belén. Desde aquí nuestro agradecimiento para ellos.

A través de un camino hecho de antorchas, sus majestades se dirigieron al salón del Ayuntamiento para iniciar el reparto de regalos a todos los presentes.

La peña Los Endrinos nos esperaba con una sopa de ajo calentita, noche mágica para niños, abuelos, papás, y todos los que por un momento nos sentimos niños otra vez.

 

Muchas gracias Majestades.

El Mesón de Frutos fue el punto de encuentro de varias peñas para cerrar esta noche mágica.

El 6 de enero nuevamente apareció la nieve, esto influyó para que muchos anticiparan el retorno, ya por la tarde no quedaban niños para seguir disfrutando del pueblo.

 

Todo esto no habría sido posible sin la colaboración de  las peñas La Fuente y Endrinos, Asociación de Jubilados, Asociación Cultural, Ayuntamiento y Parroquia.

Todo esto no tendría sentido sin los guiletos.

Feliz 2018 para todos. Enseguida carnavales,. Nos vemos!!

No olvides que Mecerreyes es SUPERRRR….ORIGENIAL!!!!!

 

Y original es la Felicitación de Navidad personalizada que recibimos de un «Guileto»: Óscar Fonturbel. Muchas gracias