GALLO 2011

La corrida del gallo de carnaval de este año 2011 ha tenido mucho eco, la afluencia de gente ha superado a la de cualquier otro año, pudo ser por el buen tiempo, o por la invitación que se hizo desde distintos medios de comunicación tanto escritos como en emisoras de radio. Los asistentes marcharon con buen sabor de boca –no sólo por los dulces- sino por lo original y vistosidad de la fiesta, como dice el primer párrafo del artículo que publicó “El Correo de Burgos” y que reproducimos en su totalidad al final de esta noticia:

  • El pueblo de Mecerreyes, fiel a sus tradiciones ha vuelto a representar un rito ancestral, la celebración del Carnaval. Una gran representación escénica callejera donde todos somos cómplices y partícipes, donde no existe un guión a representar ni a contemplar, solamente se vive. Y hasta que punto se vivieron ayer los actos centrales de esta fiesta ya que la soleada tarde reunió en la villa guileta a cientos de personas….,

¿HASTA CUANDO DURARÁ ESTA FIESTA DEL GALLO?

Es un serio interrogante que se plantea este cronista de ocasión y bueno sería abrir un debate, reflexión o como se quiera llamar sobre la pervivencia de esta nuestra Fiesta, única y original, seña de identidad de nuestro pueblo.

Porque la realidad tozuda de cada año es que es difícil encontrar colaboración y participación activa, que pasiva si hay y todos alardeamos de la fiesta de nuestro pueblo, pero quizá tan sólo vamos a ver que tal lo hacen o a pasar un rato agradable.

Quizá sea útil pararse a contar, cuanta gente es necesaria para desarrollar dignamente la fiesta. Pues estos son los datos que nos facilita la organización:

  • Para dar la ronda matutina de aguinaldos: Mínimo 10-12 personas
  • En las zarramacadas, otras 15-16 personas: para correr el disfraz de plumas, lanas, botones, trapos, huesos, oso, jabalí, centeno, gallarones, zancos, saco, coloño, cribas, cuerdas, vaca, enano. (sin contar la gente que tiene que ayudar a colocar los disfraces)

En la corrida del gallo. Los protagonistas de este año han sido:

  • Rey: Andrés
  • Zarramacos: Diego, Mario y Rubén
  • Zarramacos de niños: Pablo y Marcos
  • Mozo Mayor: Miguel
  • Alguaciles: Rui, Joaquín, Pepe y Carmelo
  • Danzantes: Dani, Iván, Luis, Jorge, David, Javier, Óscar y Raúl.
  • Dulzaineros: Benito, Alfredo y Jesús.
  • Cantores: Muchos, no ponemos nombres pues no dejaríamos a bastantes pero, gracias a todos.
  • Realización de dulces que se reparten al final de la fiesta: Naranjas con azúcar y guirlache por la Asociación de Jubilado. Orejuelas.

Si contamos con 40 cantores –que hay más- con otras 10 personas para preparar los dulces y otras 10 para ayudar a vestir a los protagonistas, podemos decir que necesitamos un mínimo de 110-120 personas con participación directa, más las personas de la organización; es fácil pensar que para un pueblo pequeño como Mecerreyes, la participación tiene que ser de TODO EL PUEBLO.

Esta claro que tenemos que concienciarnos que nadie va a venir a prepararnos la fiesta, que todos podemos poner un granito de arena ya sea con nuestra colaboración personal –hay muchas formas- o animando a pequeños y jóvenes a su participación.

Este año –nos apunta la organización- “estamos muy orgullosos de la gente joven que ha participado (esperamos contar con todos ellos para el próximo año) “

Este cronista está convencido de que la clave para mantener la fiesta, puede estar en que los niños y jóvenes se conciencien –si de verdad les gusta la fiesta, se sienten guiletos y quieren a su pueblo- de que es una fiesta en la que se tienen que sentir “obligados” a hacer algo, a participar y no sólo de espectadores o curiosos. Para muchos quizá exagero un poco y hay, evidentemente, otras maneras de demostrar el amor por el pueblo y la lucha por su pervivencia, pero todos nos lamentaríamos si perdiésemos esta seña de identidad de Mecerreyes.

En otro orden de cosas, la cena de carnaval –que levanta algún chismorreo- pretende además de continuar la tradición, crear un lazo de unión entre los más jóvenes. Se hace de víspera después de terminar con los preparativos del sábado y puede acudir cualquiera que colabore, siendo el menú el tradicional de los carnavales: pollo, tortilla de escabeche y naranjas con azúcar.

Nos aclara la organización, que “no sólo en esta cena, se emplea el dinero sacado de los aguinaldos, también se está consiguiendo tener un vestuario propio para la utilizar en fiesta; en concreto este año -Alfonso Diez (Folclorista experto en el traje popular burgalés y la etnografía de la provincia)- ha sido en encargado de confeccionar una chaquetilla para los alguaciles.”

Nos piden, por último, los organizadores que demos un sincero agradecimiento a todos los que abrís las puertas de vuestra casa para dar, no sólo el aguinaldo, sino sobre todo vuestra amplia y generosa sonrisa. Dicho queda.

Como soñar es gratis, yo sueño que, aunque la Asociación Cultural sea la encargada de coordinar la Fiesta, junto con la colaboración del Ayuntamiento y la Asociación de Jubilados, esta FIESTA DEL GALLO DE CARNAVAL DE MECERREYES, sea eso, la GRAN FIESTA DE TODO EL PUEBLO DE MECERREYES. Y por soñar, sueño que el próximo año aparecerán nuevos disfraces para salir en las zarramacadas, acordes al carnaval guileto y que habrá muchos más voluntarios sin tener que llamar e insistir a última hora.

Repetimos los enlaces de tres videos del Gallo de este año que nos dejó Óscar en YouTube. Muchas gracias por los videos y por la felicitación.

http://www.youtube.com/watch?v=zDfRHxIvF30

http://www.youtube.com/watch?v=BkBX0iMLySA

http://www.youtube.com/watch?v=BCxOjPnYiEE

Disfruta con las fotos del Domingo Gordo en Mecerreyes del año 2011 – 6 de Marzo:

 
 
 

 A continuación reproducimos el artículo completo que publicó “El Correo de Burgos” el lunes 7 de marzo de 2011.

CARNAVAL / Tradiciones en la provincia

Mecerreyes vive el Domingo Gordo con un rey, un gallo y zarramacos

 La buena temperatura animó la fiesta del Gallo que contó con cientos de asistentes

Lun, 07/03/2011

M.A. DE LA CRUZ / Mecerreyes
El pueblo de Mecerreyes, fiel a sus tradiciones ha vuelto a representar un rito ancestral, la celebración del Carnaval. Una gran representación escénica callejera donde todos somos cómplices y partícipes, donde no existe un guión a representar ni a contemplar, solamente se vive. Y hasta que punto se vivieron ayer los actos centrales de esta fiesta ya que la soleada tarde reunió en la villa guileta a cientos de personas.
Durante el Domingo Gordo, como en Mecerreyes se conoce al Domingo de Carnaval, por la mañana los mozos piden el aguinaldo para sufragar la merienda de la tarde.
El personaje principal del festejo es el gallo. Después de engalanarlo sobre una rueca, la comitiva se dirige al Ayuntamiento a pedir permiso al alcalde para la representación de la fiesta. Acto seguido el grupo va en busca del Rey, un chico de la localidad de unos diez años que ha de llevar al gallo durante la celebración y comienza el recorrido de las calles y plazas, en total son siete las paradas que se hacen.
El motivo principal del festejo es arrebatar el gallo, verdadero protagonista del evento, de las manos del Rey, acción que intentarán evitar los Zarramacos, mozos fornidos, vestidos con pieles y cencerros y con la cara pintada.
El tamboril y la dulzaina interpretan una melodía, el grupo de danzantes baila, cuando estos acaban el coro canta las Coplas del Gallo de Carnaval y es en ese momento cuando los corredores pueden saltar para apresar al gallo, que para no herir sensibilidades  se le cambia por uno de trapo. Se inicia una frenética carrera en la que el Zarramaco intenta dar alcance al ladrón y golpearle con la tarrañuela si este consigue completarla le entrega el gallo al rey y se va a la siguiente parada y como dice una estrofa de la copla «el que entre a por el gallo, lo que en limpio va a sacar es un palo con la estaca y no puede reclamar».
La fiesta termina con el entierro del gallo, subasta, degustación de dulces y baile de rueda en la plaza.